Nehemías 4 Biblia Peshitta en Español (Holman Bible Publishers, 2015) | 23 versitos |
1 Al enterarse Sambalat de que nosotros reconstruíamos la muralla, se disgustó y se encolerizó muchísimo, y haciendo burla de los judíos,
2 dijo a sus hermanos y a las tropas de los samaritanos: ¿Qué están haciendo estos judíos? Están alardeando. Que dejen de presentar sacrificios y que coman hasta el día que recojan estas piedras de entre los montones de escombro quemado.
3 Junto a él estaba Tobías el amonita, quien decía: No importa qué tanto reconstruyan éstos; estoy seguro de que si un zorro trepara, derribaría las piedras de sus muros.
4 ¡Escucha, oh Dios nuestro! Porque ellos nos han convertido en objeto de escarnio. Vuelve su afrenta sobre su propia cabeza, y entrégalos al despojo en la tierra de su cautiverio;
5 no pases por alto sus culpas ni sus pecados sean cubiertos ante ti, pues enfureciéndose, se opusieron a la reconstrucción que nosotros estamos llevando a cabo.
6 No obstante, nosotros reconstruiremos la muralla; de hecho, la estamos reconstruyendo, y se ha avanzado en la muralla hasta la mitad. Entonces el pueblo entero se manifestó abiertamente a favor de trabajar.
7 Entonces, habiéndose enterado Sambalat, Tobías, los árabes, los amonitas y los de Asdod, de que se les había fijado un plazo para la reconstrucción de la muralla de Jerusalén, y que las brechas estaban empezando a ser cerradas, ellos se disgustaron más;
8 y todos ellos conspiraron unánimemente para venir a pelear contra Jerusalén, a fin de causarles tropiezo.
9 Pero nosotros elevamos oración a nuestro Dios para que nos pusiera guardias contra ellos de día y de noche.
10 Pero los judíos dijeron: A los acarreadores les faltan las fuerzas, y todavía hay muchísimos escombros. No podremos reconstruir la muralla.
11 Y nuestros enemigos dijeron: Que no se den cuenta ni sospechen hasta que caigamos sobre ellos y los matemos, y hagamos cesar su obra.
12 Y cuando los judíos que moraban entre ellos llegaron, les dijeron: He aquí que ahora vienen de todos los lugares donde viven, diez veces más a fin de combatirlos.
13 Y llegaron y se han apostado detrás de la muralla para atacarlos con flechas. Entonces distribuí las fuerzas por familias, con sus espadas, sus lanzas y sus arcos.
14 Y yo sentí miedo, pero me levanté y dije a los principales, a los oficiales y al resto de la gente: ¡No teman delante de ellos! ¡Recuerden a Yahweh grande y temible; luchen por sus hermanos, por sus hijos y sus hijas; también por causa de sus esposas y sus casas!
15 Y sucedió que al enterarse nuestros enemigos de que estábamos informados acerca del asunto y de que Yahweh había anulado sus planes, nos regresamos y subimos a la muralla, y continuamos trabajando cada uno en su labor.
16 Pero desde ese día en adelante, la mitad de los jóvenes (que eran la mitad del pueblo) trabajaban en la obra, en tanto que la otra mitad empuñaba las lanzas, los escudos, los arcos y las corazas, y los oficiales estaban a la retaguardia de los judíos y reconstruían los muros.
17 Los que traían las cargas, las traían con unas barras; y con una mano trabajaban en la obra, y con la otra mano empuñaban el arma;
18 y cada uno de los que construían tenía ceñida su espada, y se levantaba a construir. Mientras, el que tocaba la trompeta estaba a su retaguardia.
19 Entonces dije a los principales, a los oficiales y al resto de la gente: La obra es grande y extensa, y estamos distanciados y apostados sobre el muro, lejos el uno del otro.
20 Pero en el sitio donde oigan el sonido de la trompeta, allí concéntrense con nosotros; y nuestro Dios peleará a nuestro favor.
21 Así nosotros continuaremos con nuestra labor, mientras que la mitad de nosotros estará empuñando las lanzas desde que despunte el alba hasta que salgan las estrellas.
22 También en ese tiempo dije a la gente: Cada uno quédese con su siervo en medio de las calles de Jerusalén, para que hagan guardia de noche y de día, a fin de que los obreros hagan la obra.
23 Y ni yo, ni mis compañeros, ni mis criados ni los guardias de mi casa nos quitamos nuestra ropa en el transcurso de todo un mes; cada uno hizo lo que le correspondía.

Patrocinio

 
 

Introducción a Nehemías

Fuente:

Patrocinio