Salmos 31 Dios Habla Hoy (2002) | 24 versitos |
1
Confianza en el Señor [a]
Del maestro de coro. Salmo de David.

Señor, en ti busco protección;
¡no me defraudes jamás!
¡Ponme a salvo, pues tú eres justo!
2 Dígnate escucharme;
¡date prisa, líbrame ya!
Sé tú mi roca protectora,
¡sé tú mi castillo de refugio y salvación!
3 ¡Tú eres mi roca y mi castillo!
¡Guíame y protégeme; haz honor a tu nombre!
4 ¡Sácame de la trampa que me han tendido,
pues tú eres mi protector!
5 En tus manos encomiendo mi espíritu; [b]
¡rescátame, Señor, Dios de la verdad!
6 Odio a los que adoran ídolos inútiles.
He puesto mi confianza en el Señor.
7 Tu amor me trae gozo y alegría.
Tú has visto mis tristezas,
conoces mis aflicciones;
8 no me entregaste en manos del enemigo;
¡me hiciste poner pie en lugar seguro!
9 Señor, ten compasión de mí,
pues estoy en peligro.
El dolor debilita mis ojos,
mi cuerpo, ¡todo mi ser!
10 ¡El dolor y los lamentos
acaban con los años de mi vida!
La tristeza [c] acaba con mis fuerzas;
¡mi cuerpo se está debilitando!
11 Soy el hazmerreir de mis enemigos,
objeto de burla [d] de mis vecinos,
horror de quienes me conocen.
¡Huyen de mí cuantos me ven en la calle! [e]
12 Me han olvidado por completo,
como si ya estuviera muerto.
Soy como un jarro hecho pedazos. [f]
13 Puedo oir que la gente cuchichea:
?Hay terror por todas partes.? [g]
Como un solo hombre, hacen planes contra mí;
¡hacen planes para quitarme la vida!
14 Pero yo, Señor, confío en ti;
yo he dicho: ?¡Tú eres mi Dios!?
15 Mi vida está en tus manos;
¡líbrame de mis enemigos, que me persiguen!
16 Mira con bondad a este siervo tuyo,
y sálvame, por tu amor.
17 A ti clamo, Señor;
¡no me hundas en la vergüenza!
¡Hunde en la vergüenza a los malvados;
húndelos en el silencio del sepulcro! [h]
18 Queden en silencio los labios mentirosos,
que hablan con burla y desprecio
y ofenden al hombre honrado.
19 ¡Qué grande es tu bondad con aquellos que te honran!
La guardas como un tesoro,
y a la vista de los hombres
la repartes a quienes confían en ti.
20 Con la protección de tu presencia
los libras de los planes malvados del hombre;
bajo tu techo los proteges
de los insultos de sus enemigos.
21 Bendito sea el Señor, que con su amor
hizo grandes cosas por mí
en momentos de angustia. [i]
22 En mi inquietud llegué a pensar
que me habías echado de tu presencia;
pero cuando te pedí ayuda,
escuchaste mis gritos.
23 Amad al Señor, todos vosotros, sus fieles.
El Señor cuida de los sinceros,
pero a los altaneros
les da con creces su merecido.
24 Dad ánimo y valor a vuestros corazones,
todos los que confiáis en el Señor. [j]


Patrocinio

 
 

Introducción a Salmos

No hay comentario

Fuente: Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)

Patrocinio

Notas

Salmos 31,1-24

Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 31.5 Según Lc 23.46 estas fueron las últimas palabras de Jesús. Cf. también Hch 7.59.

[2] 31.10 La tristeza: según versiones antiguas. Heb. mi maldad.

[3] 31.11 Objeto de burla: texto probable. Heb. mucho.

[4] 31.13 Jer 20.4,10; 46.5; 49.29.

[5] 31.21 En momentos de angustia: texto probable. Heb. en una ciudad sitiada.