Lamentaciones  . 1,14
“
J untó Dios todos mis pecados
y me los ató al cuello.
Ya no me quedan fuerzas;
ya no los soporto más.
Dios me entregó al enemigo,
y no puedo defenderme. ”
Lamentaciones  . 1,14
y me los ató al cuello.
Ya no me quedan fuerzas;
ya no los soporto más.
Dios me entregó al enemigo,
y no puedo defenderme. ”