Oseas  . 9,3

(3-4) No tendrás pan ni vino

para ofrecerlos en honor de tu Dios;

el poco pan que comas

será como pan de velorio:

sólo sirve para calmar el hambre,

pero no para ofrecérselo a Dios,

porque Dios no lo acepta.

»Israel, ya no vivirás en la tierra

que Dios te dio.

Más bien volverás al país de Egipto

y al país de Asiria.

Allí tendrás que alimentarte

con lo que Dios te ha prohibido comer.


Patrocinio