Hechos 18 Nuevo Testamento (Bover-Cantera, 1957) 4ta Edición | 28 versitos |
1 Tras esto, partiendo de Atenas, llegó a Corinto.
2 Y habiéndose encontrado con cierto judío por nombre Aquilas, póntico de origen, recientemente venido de Italia, y con Príscila, su mujer —con motivo de haber Claudio ordenado que todos los judíos abandonasen a Roma—, se allegó a ellos;*
3 y por ser del mismo oficio, se quedó con ellos, y trabajaba; porque eran de oficio fabricantes de tiendas de campaña. *
4 Discutía cada sábado en la sinagoga, y se esforzaba por persuadir a judíos y a griegos.
5 Mas luego que bajaron de Macedonia Silas y Timoteo, Pablo andaba todo ocupado en la predicación de la palabra, testificando a los judíos que el Mesías era Jesús.
6 Mas, como ellos le hiciesen oposición y respondiesen con ultrajes, él, sacudiendo sus vestidos, les dijo: Vuestra sangre recaiga sobre vuestra cabeza; yo, inocente de esa sangre, desde este momento me dirigiré a los gentiles.
7 Y trasladándose de allí, entró en la casa de uno por nombre Tito Justó, que adoraba a Dios, cuya casa estaba contigua a la sinagoga. *
8 Crispo el arquisinagogo creyó en el Señor con toda su casa; y muchos de los corintios, al oír la palabra, creían y eran bautizados. *
9 Y dijo el Señor durante la noche por visión a Pablo: No temas, sino continúa hablando y no te calles;
10 pues yo estoy contigo, y nadie pondrá en ti sus manos para hacerte mal, pues es mucho el pueblo que tengo en esta ciudad,
11 Y permaneció de asiento un año y seis meses, enseñando entre ellos la palabra de Dios.
12 Siendo Galión procónsul de Acaya, los judíos, con una misma furia, se echaron encima de Pablo y le condujeron ante el tribunal,*
13 diciendo: Este persuade a los hombres a dar a Dios un culto que está fuera de la ley.
14 Mas cuando Pablo iba a abrir su boca, dijo Galión a los judíos: Si se tratara de algún acto contra justicia o de alguna mala fechoría, con razón, ¡oh judíos!, os escucharía yo con calma;
15 pero si son dimes y diretes sobre palabras, sobre nombres y sobre vuestra propia ley, allá lo veréis vosotros; juez yo de esas cosas no quiero serlo.
16 Y les ordenó despejar el tribunal.
17 Cogiendo entonces todos a Sostenes el arquisinagogo, le golpeaban delante del tribunal. Y nada le importaba de esto a Galión. *
18 Pablo, habiendo permanecido allí bastantes días aún, despidiéndose de los hermanos, se embarcó para la Siria, y con él Priscila y Aquilas, que en Cencreas se había hecho rapar la cabeza, porque tenía un voto. *
19 Y aportaron en Efeso, y a ellos dejólos allí; y él, entrando en la sinagoga, se puso a hablar a los judíos.
20 Y aun cuando ellos le rogaban que se detuviese allí más tiempo, no accedió,
21 sino que, despidiéndose y diciendo: Otra vez volveré a vosotros, si Dios quisiere, se hizo a la vela desde Efeso;
22 y habiendo desembarcado en Cesárea, después de subir y saludar a la Iglesia, bajó a Antioquía. *
23 Y habiendo pasado allí algún tiempo, se partió, y recorría sucesivamente la región de Galacia y la Frigia, fortaleciendo a todos los discípulos. *
24 Cierto judío por nombre Apolo, alejandrino de origen, hombre elocuente, que dominaba las Escrituras, arribó a Efeso.
25 Este había sido instruido en el camino del Señor, y con el hervor de espíritu que le movía, hablaba y enseñaba con singular esmero lo tocante a Jesús, si bien no conocía otro bautismo sino el de Juan. *
26 Y éste comenzó a exhibirse gallardamente en la sinagoga. Mas cuando le oyeron Priscila y Aquilas, le tomaron por su cuenta, y con mayor exactitud le expusieron el camino de Dios.
27 Y resolviéndose él pasar a la Acaya, animándole a ello los hermanos, escribieron a los discípulos que le acogieran. El cual, llegado que fue, contribuyó mucho, con el auxilio de la gracia, al provecho de los que habían creído.
28 Porque con gran vigor rebatía en público a los judíos, demostrando por las Escrituras que el Mesías era Jesús.

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Introducción a Hechos




HECHOS DE LOS
APOSTÓLES

AUTENTICIDAD. — El testimonio unánime y universal de los escritores eclesiásticos de los tres primeros siglos a favor de la autenticidad del libro de los Hechos como obra de San Lucas es una prueba documental cual no lo posee a su favor ningún escrito profano de la antigüedad, y que sólo puede compararse con la que acredita la autenticidad de los Evangelios o de las Epístolas de San Pablo. Y si callase la prueba testifical, bastaba la sola crítica interna para descubrir al verdadero autor de los Hechos. Los prólogos gemelos de las dos obras, y no menos la identidad de lenguaje, en la lexicografía, en la construcción, en los modismos, están diciendo a voces que el autor de los Hechos es el autor mismo del tercer Evangelio. Y los numerosos rasgos paulinos delatan la mano del fiel discípulo de San Pablo, como los frecuentes términos de medicina señala a Lucas el médico. HISTORICIDAD. — Los numerosísimos datos acumulados en la historia de los Hechos, el contacto constante con toda la vida social, política y religiosa de tantos pueblos diferentes y aun contrarios, nos permiten hoy día comprobar la verdad y fidelidad de la narración. Cuanto ha podido comprobarse, que es poco menos que todo, ha resultado rigurosamente exacto. Y es interesante que las dudas suscitadas contra algún pormenor de la narración de los Hechos han sido últimamente disipadas. Un ejemplo significativo. Habla Lucas de Sergio Pablo, procónsul de Chipre- Algunos críticos osaron atacar la exactitud de la expresión, afirmando que Sergio Pablo no fue procónsul, sino propretor. Pero las inscripciones recientemente descubiertas en Chipre hablan del procónsul Sergio Pablo. Y es tanto más admirable la exactitud de Lucas, por cuanto la provincia de Chipre sólo por breve tiempo fue senatoria (o gobernada por un procónsul), habiendo sido poco antes y poco después imperial (o regida por un propretor). Con igual precisión habla del procónsul de Acaya, de los asiarcas y del escriba de Efeso, de los pretores o estrategos de Filipos, de los politarcas de Tesalónica, del Primero de Malta. Y el largo viaje marítimo narrado en los dos últimos capítulos ha sido considerado por los técnicos como un portento de exactitud y precisión. TIEMPO DE SU COMPOSICIÓN. — El año en que se escribió el libro de los Hechos es la bate o punto de referencia para conocer la cronología de los tres primeros Evangelios. De ahí su importancia. Terminan los Hechos en el bienio de la custodia libera en que estuvo San Pablo durante los años 61-63 (o 60-62), sin mencionar la sentencia judicial, que fue entonces de absolución. Al fin, por tanto, de este bienio hubo de terminarse la composición de los Hechos. Como los Hechos comienzan refiriéndose al «primer tratado» (1:1), que es el tercer Evangelio, síguese de ahí que éste hubo de escribirse anteriormente, tal vez hacia el año 60. Por otra parte, sabemos por la tradición que los Evangelios de Mateo y Marcos son anteriores al de Lucas. Fueron, por tanto, escritos antes del año 60, verosímilmente hacia los años 50 y 55, respectivamente. EL TEXTO. — Unos pocos códices, llamados occidentales, representan un tipo de texto algo más largo que el de los códices orientales. Surge, pues, el problema: ¿cuál de los dos textos es el primitivo y genuino? ¿Hay interpolaciones en el texto occidental o más bien hay o misiones en el oriental ? No es posible dar una solución simple y tajante. Sólo en general puede decirse que, si algunas veces es el texto oriental quien abrevia indebidamente el texto primitivo, las más de las veces, empero, es el occidental quien lo interpola. Algunas de estas interpolaciones parecen ser anotaciones hechas al texto de Lucas por algunos que quisieron enriquecerlo con noticias personales que parecen fidedignas.



Fuente: Sagrada Biblia (Bover-Cantera, 1957)

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Notas

Hechos 18,2

PÓNTICO: natural del Ponto.

|| Según Orosío, los judíos fueron expulsados de Roma el año noveno de Claudio (25 de enero del 49 al 25 de enero del 50). Pablo llegaría a Corinto el año 50 ó el 51.


Hechos 18,3

FABRICANTES DE TIENDAS: las fabricaban con telas de pelos de cabra. Esta tela se llamaba cilicio por fabricarse en Cilicia, patria de Pablo.


Hechos 18,7

TITO JUSTO: aunque gentil, ADORABA al verdadero Dios y frecuentaba la sinagoga de los judíos.


Hechos 18,8

CRISPO fue uno de los pocos bautizados personalmente por Pablo (1Co_1:14).


Hechos 18,12

Lucio Junio Anneo GALIÓN era cordobés, como su hermano Lucio Anneo Séneca. Fue PROCÓNSUL DE ACAYA desde abril del 51 hasta abril del 52.


Hechos 18,17

SOSTENES EL ARQUISINAGOGO: no se sabe si fue sucesor o colega de Crispo o bien jefe o uno de los jefes de otra sinagoga.


Hechos 18,18

SE EMBARCÓ: por otoño del 51.

|| CENCREAS: puesto oriental de Corinto, «la de dos mares».

|| SE HABÍA HECHO RAPAR LA CABEZA: esta acción señalaba el cumplimiento del tiempo para el cual se había hecho el voto. El voto de que se habla sería el nazareato o algún voto semejante. El texto algo ambiguo de Lucas no permite resolver con entera seguridad si el voto lo hizo Aquila o Pablo.


Hechos 18,22

A LA IGLESIA: muchos suponen que se habla de la Iglesia madre de Jerusalén.


Hechos 18,23

SE PARTIÓ: era el año 52.

|| GALACIA: literalmente «la región galática», que debe tomarse en sentido etnológico.

|| FRIGIA: al O. de Galacia.


Hechos 18,25

EL CAMINO DEL SEÑOR: ahora se diría la doctrina cristiana . Es singular el conocimiento que del cristianismo tenía Apolo: aunque no inexacto, muy incompleto; pues ignoraba un elemento tan esencial como es el bautismo cristiano.