1 3. Advertencias y enseñanzas Sobre la circuncisión y la ley Ahora, hermanos míos, alegraos en el Señor. [a] Para mí no es ninguna molestia repetiros lo ya escrito, y para vosotros es útil. |
2 Guardaos de esa gente despreciable, [b] de esos que hacen el mal, de esos que mutilan el cuerpo. [c] |
3 Porque los verdaderos circuncidados [d] somos nosotros, los que adoramos a Dios movidos por su Espíritu, [e] los que nos gloriamos de ser de Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en cosas externas. [f] |
4 Aunque también yo tengo razones para confiar en esas cosas. Nadie tendría más razones que yo para confiar en ellas, |
5 pues me circuncidaron a los ocho días de nacer, [g] soy de raza israelita, pertenezco a la tribu de Benjamín [h] y soy hebreo e hijo de hebreos. [i] En cuanto a la interpretación de la ley judía, pertenecí al partido fariseo, [j] |
6 y era tan fanático que perseguía a la iglesia; [k] y en cuanto al cumplimiento de la ley, nadie tuvo nada que reprocharme. [l] |
7 Pero todo esto, que antes era muy valioso para mí, ahora, a causa de Cristo, lo tengo por algo sin valor. |
8 Aún más, a nada concedo valor cuando lo comparo con el bien supremo de conocer a Cristo Jesús, [m] mi Señor. Por causa de Cristo lo he perdido todo, y todo lo considero basura a cambio de ganarlo a él |
9 y encontrarme unido a él; no por una justicia propia basada en la obediencia a la ley, sino por la fe en Cristo, por la cual Dios me hace justo. [n] |
10 Lo que quiero es conocer a Cristo, sentir en mí el poder de su resurrección, tomar parte en sus sufrimientos y llegar a ser como él en su muerte, [ñ] |
11 con la esperanza de alcanzar la resurrección de los muertos. De camino hacia la meta |
12 No quiero decir que ya lo haya conseguido todo [o] ni que ya sea perfecto; pero sigo adelante con la esperanza de alcanzarlo, puesto que Cristo Jesús me alcanzó primero. [p] |
13 Hermanos, no creo haberlo alcanzado aún; lo que sí hago es olvidarme de lo que queda atrás y esforzarme por alcanzar lo que está delante, |
14 para llegar a la meta y ganar el premio que Dios nos llama a recibir por medio de Cristo Jesús. [q] |
15 Todos los que poseemos una fe madura [r] debemos pensar de esta manera. Y si en algo pensáis de otro modo, Dios os lo hará ver también. |
16 Pero, eso sí, debemos vivir de acuerdo con lo que ya hemos alcanzado. Ciudadanos del cielo |
17 Hermanos, seguid mi ejemplo [s] y fijaos también en quienes viven según el ejemplo que os hemos dado. |
18 Ya os he dicho muchas veces, y ahora lo repito con lágrimas, que muchos están viviendo como enemigos de la cruz de Cristo |
19 y acabarán por ser destruidos. Su dios son sus propios apetitos, [t] y se sienten orgullosos de aquello que debería darles vergüenza. Solo piensan en las cosas de este mundo. |
20 En cambio, nosotros somos ciudadanos del cielo [u] y estamos esperando que del cielo venga el Salvador, el Señor Jesucristo, [v] |
21 que cambiará nuestro cuerpo miserable en un cuerpo glorioso como el suyo. [w] Y lo hará por medio del poder que tiene para dominar todas las cosas.
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