I Juan 4 Biblia Peshitta en Español (Holman Bible Publishers, 2015) | 21 versitos |
1 No crean a todos los espíritus, amados míos, sino disciernan los espíritus para saber si son de Dios, porque han salido por el mundo muchos falsos profetas.
2 En esto se conoce el espíritu que es de Dios: todo espíritu que reconoce que Jesucristo vino en carne, es de Dios,
3 y todo espíritu que no reconoce que Jesús vino en carne, no es de Dios, sino que éste es del falso ungido, acerca de quien han escuchado que viene, y ahora ya está en el mundo,
4 pero ustedes son hijos de Dios y los han vencido a ellos, porque mayor es el que está en ustedes que el que está en el mundo.
5 Ellos pertenecen al mundo, por eso lo que hablan es del mundo y el mundo los escucha.
6 Pero nosotros somos de Dios. El que conoce a Dios, nos escucha; el que no es de Dios, no nos escucha. Por esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de engaño.
7 Amados míos, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios, y todo el que ama es nacido de Dios, y conoce a Dios,
8 porque Dios es amor; y todo el que no ama no conoce a Dios.
9 El amor de Dios por nosotros es conocido en esto: en que Dios envió a su Hijo Unigénito al mundo para que seamos salvos por medio de Él.
10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Dios nos amó a nosotros y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.
11 Amados míos, si Dios nos amó de esta manera, también nosotros debemos amarnos unos a otros.
12 Ninguno ha visto a Dios jamás, pero si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se ha consumado en nosotros.
13 Y en esto sabemos que permanecemos en Él y Él permanece en nosotros: en que nos ha dado de su Espíritu,
14 y hemos visto y damos testimonio de que el Padre envió a su Hijo, el Salvador del mundo.
15 Todo el que reconoce que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él permanece en Dios,
16 y nosotros hemos creído y conocido el amor que Dios tiene por nosotros, porque Dios es amor, y todo el que permanece en amor permanece en Dios.
17 Y en esto se ha consumado su amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio, pues tal como Él es, también así somos nosotros en este mundo.
18 En el amor no hay temor, sino que el amor perfecto echa fuera al temor, porque el temor proviene de la desconfianza, y el que teme no ha sido perfeccionado en el amor.
19 Así que nosotros amamos a Dios porque Él nos amó primero.
20 Pero si alguno dice: “Yo amo a Dios”, pero odia a su hermano, el tal es un mentiroso, porque el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?
21 Y éste es el mandamiento que hemos recibido de Él: todo el que ama a Dios, también ame a su hermano.

Patrocinio

 
 

Introducción a I Juan

Fuente: