II Samuel  15, 24-29

También estaba Sadoc con todos los levitas que llevaban el Arca de la alianza de Dios. Colocaron el Arca junto a Abiatar, hasta que toda la gente terminó de salir de la ciudad. El rey dijo a Sadoc: — Devuelve el Arca de Dios º a la ciudad, que si alcanzo el favor del Señor, él me permitirá volver a ver el Arca y su morada. Pero si manifiesta que no le agrado, estaré dispuesto a que haga conmigo lo que quiera. Y el rey insistió al sacerdote Sadoc: — Mira, regresen en paz a la ciudad junto con sus dos hijos, con tu hijo Ajimás y con Jonatán, el hijo de Abiatar. Y estén atentos, pues yo estaré esperando en los pasos del desierto hasta que me llegue alguna información de ustedes. Sadoc y Abiatar regresaron a Jerusalén con el Arca de Dios y se quedaron allí.
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