Genesis 28, 18-19

A la mañana siguiente Jacob se levantó temprano, tomó la piedra que había usado de cabezal, la erigió como piedra votiva º y la consagró ungiéndola con aceite. Y llamó a aquel lugar Betel —es decir, Casa de Dios—. El nombre que anteriormente tenía la ciudad era Luz *, pero Jacob le cambió este nombre por el de Betel º.
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