II Crónicas  14, 8-14

[[14:7]] Asá tenía un ejército de trescientos mil hombres de Judá, que llevaban pavés y lanza, y doscientos ochenta mil de Benjamín, que portaban escudo y eran arqueros. Todos eran esforzados guerreros. [[14:8]] Salió contra ellos Zéraj el nubio, con un ejército de un millón de hombres y trescientos carros, y llegó hasta Maresá. [[14:9]] Asá le salió al encuentro y se pusieron en orden de batalla en el valle de Sefatá, junto a Maresá. [[14:10]] Asá invocó así a Yahvé su Dios: «¡Sólo tú, Yahvé, puedes ayudar entre el poderoso y el desvalido! ¡Ayúdanos, pues, Yahvé, Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos y en tu nombre marchamos contra esta inmensa muchedumbre! ¡Yahvé, tú eres nuestro Dios! ¡No prevalezca contra ti hombre alguno!» [[14:11]] Yahvé derrotó a los nubios ante Asá y Judá. Los nubios emprendieron la huida, [[14:12]] pero Asá y la tropa que lo acompañaba los persiguieron hasta Guerar. Los nubios cayeron, hasta no quedar nadie con vida, pues fueron destrozados por Yahvé y sus huestes. Se recogió un botín inmenso. [[14:13]] Batieron todas las ciudades de los alrededores de Guerar, porque el terror de Yahvé cayó sobre ellas; y saquearon todas las ciudades, pues había en ellas gran botín.
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