Isaías 17, 4-7

Aquel día será debilitada la gloria de Jacob, y su gordura enflaquecerá. Será como cuando apuña un segador* la mies, y su brazo las espigas siega; como espigador en el Valle de Refaín —que quedan en él rebuscos—; como en el vareo del olivo: dos, tres bayas en la punta de la guía; cuatro, cinco en sus ramas fructíferas —oráculo de Yahvé, el Dios de Israel—. Aquel día se dirigirá el hombre a su Hacedor, y sus ojos hacia el Santo de Israel mirarán.
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