Levítico 19, 33-34

«Cuando un forastero resida entre vosotros, en vuestra tierra, no lo oprimáis. Al forastero que reside entre vosotros lo miraréis como a uno de vuestro pueblo y lo amarás como a ti mismo, pues también vosotros fuisteis forasteros en la tierra de Egipto. Yo, Yahvé, vuestro Dios.
Ver contexto