Genesis 21, 23-25

Por tanto, júrame por Dios, aquí mismo, que no me engañarás ni a mí ni a mi estirpe ni a mi linaje, y que me tratarás a mí y a esta tierra mía donde resides con la misma lealtad con que yo te he tratado. Abrahán respondió:
– Lo juro. Pero Abrahán reclamó a Abimelec por el asunto del pozo del que se habían apoderado sus criados.
Ver contexto