II Samuel  20, 4-8

El rey dijo a Amasa: “Convócame para dentro de tres días a los hombres de Judá, y hállate tú también aquí presente.” Fue, pues, Amasa a reunir a Judá, pero se detuvo más del tiempo señalado;" y David dijo a Abisaí: “Seba, hijo de Bicri, va a hacernos ahora más mal que Absalón. Toma, pues, a los siervos de tu señor y ve tras él, no sea que se acoja a las ciudades fuertes y se escape de nuestra vista.” Marcharon con Abisaí las gentes de Joab, los cereteos y feleteos y todos los valientes, y, saliendo de Jerusalén, fueron tras Seba, hijo de Bicri. Cuando llegaron a la gran piedra que hay en Gabaón, les salió al encuentro Amasa. Iba Joab vestido de una túnica, y sobre ella llevaba ceñida a sus lomos una espada en su vaina, y, según avanzó, se cayó de ella la espada.
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