Daniel  13, 55-59

Replicó Daniel: Muy bien, has mentido contra tu propia cabeza, pues ya el ángel de Dios ha recibido la orden de partirte por medio. Y haciéndole retirar, mandó traer al otro y le dijo: Raza de Canaán y no de Judá, la belleza te sedujo y la pasión pervirtió tu corazón. Así hacíais a las hijas de Israel, y ellas de miedo se os rendían; pero esta hija de Judá no consintió en vuestra iniquidad." Ahora, pues, ¿bajo qué árbol los habéis sorprendido acariciándose mutuamente? Contestó él: Bajo una encina. Díjole Daniel: Muy bien, has mentido tú también contra tu cabeza, pues el ángel de Dios tiene pronta ya la espada para rajarte por medio, para aniquilaros.
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