Hechos 10, 12-15

en el que había toda clase de animales cuadrúpedos, reptiles y aves del cielo. Y vino a él una voz que le dijo: Simón, levántate, mata y come. Pero Simón dijo: ¡De ningún modo, Señor mío! Jamás he comido nada impuro o inmundo. Nuevamente la voz vino a él una segunda ocasión: Lo que Dios purificó no lo tengas tú por impuro.
Ver contexto