Numeros  11, 4-5

Y una multitud de extranjeros que se mezcló entre ellos tenía un apetito insaciable, y regresaron e hicieron llorar también a los hijos de Israel, diciendo: ¡Quién nos diera carne para comer! Recordamos el pescado que comíamos gratis en Egipto, los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos.
Ver contexto