I Corintios 1, 1

Saludo

(1-3) Queridos hermanos de la iglesia de Dios en Corinto:

Reciban saludos míos, y de nuestro hermano Sóstenes.[1]

Yo, Pablo, deseo de todo corazón que nuestro Padre Dios y el Señor Jesucristo les den mucho amor y paz.

Dios me eligió para ser apóstol de Jesucristo, y también los eligió a ustedes para que vivan unidos a él y formen parte de su pueblo elegido. Así estarán unidos a nosotros y a todos los que adoran y alaban a nuestro Señor Jesucristo en todo el mundo.

Ver contexto