Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)
Salmo 62 (Vg 61): Solo En Dios Hay que Esperar.
Como en el salmo 4, se expresa
aquí la más ciega confianza en el Dios único, verdadero valedor para el salmista, incomprendido y hostilizado por doquier. El título lo atribuye a David, y, en ese supuesto, las circunstancias de la rebelión de Absalón o de Sebál darían pie para esta bella composición poética, en la que se exhorta al pueblo a poner su confianza, no en las riquezas ni en los medios terrenos,
sino sólo en Dios, fuente de justicia y de poder. En medio de las intrigas y asechanzas,
sólo queda la esperanza de la protección de Yahvé. No pocos autores ven en este salmo un marcado sello de acción de gracias, con no pocas concomitancias con los salmos de tipo sapiencial 2.
Podemos dividirlo en tres partes:
a) confianza en Dios frente a las asechanzas e hipocresías de los enemigos (2-5);
b) exhortación a confiar en Dios y no en los seres humanos (6-10);
c) el poder está únicamente en Dios, y no en las riquezas (11-13). A pesar de las persecuciones, el alma del salmista se siente segura, porque sabe que tiene la protección divina. Con toda valentía echa en cara a sus enemigos sus hipocresías y conjuras, que no han de tener efecto, porque sobre ellos está
la omnipotencia de Yahvé, que le defiende.
Las dos primeras estrofas están precedidas de un refrán que repite la misma idea (2-3 y 6-7): el alma del salmista
se siente segura en Yahvé, que es su ciudadela y su roca, inaccesible a los enemigos. Una vez declarada la seguridad de su alma y su quietud de espíritu, invita a los demás a refugiarse confiadamente en el que todo lo puede. La primera estrofa se cierra con un
selah. En el v.6 vuelve a aparecer este signo, que podía cerrar la nueva estrofa; pero el v.10 parece un complemento lógico del anterior. El estilo es rico en metáforas vigorosas, que dan colorido a la composición.
Desde' el punto de vista estilístico no hay objeciones serias contra su supuesto origen davídico, aunque no pocos críticos modernos retrasen su composición a la época sapiencial.
Confianza en Dios (1-5).
1
Al maestro el coro. Sobre Yedutún. Salmo de David 3
. 2
Sólo en Dios se aquieta mi alma, pues de El (viene) mi salvación. 3
El sólo es mi roca y mi salvación, mi ciudadela: no vacilaré jamás. 4
¿Hasta cuándo habéis de ensañaros contra un hombre, golpeando todos en brecha como contra pared inclinada, como contra muro ruinoso? 5
Sólo buscan derribarle; se deleitan con la mentira; bendicen con su boca, y en su corazón maldicen. Seldh. Antes de protestar por las añagazas de sus enemigos, el salmista declara que su confianza plena está en su Dios, y en El encuentra reposo, ya que tiene la experiencia de haberle liberado de situaciones más comprometidas.
Adherido a Yahvé, se siente como en una roca o ciudadela inaccesible, desde la que puede desafiar todos los injustos ataques de sus adversarios; por eso
no vacilará un momento, pues tiene el pie en lugar seguro.
Se siente perseguido, y este ataque es sistemático y reiterado, ya que se unen contra él como hombres que juntos fuerzan una
pared inclinada en la que se ha abierto ya brecha (v.4). No concreta el género de hostilidad de que es objeto, pero el contexto insinúa que se trata de asechanzas malévolas y traidoras, quizá porque les da en rostro su virtud. En su proceder doble, salvan las apariencias
bendiciéndole con la boca, pero odiándole y
maldiciéndole en su corazón (v.5) 4. Hipócritas redomados, creen engañarle con su aduladora conducta cuando están tramando su ruina.
Exhortación a confiar en Dios y no en los hombres (6-10).
6
Sólo en Dios aquiétate, alma mía, porque de El (viene) lo que espero. 7
El solo es mi roca y mi salvación, mi ciudadela: no vacilaré. 8
En Dios está mi salvación y mi gloria; Dios es mi fuerte roca y mi asilo. 9
Confía en El, ¡oh pueblo! en todo tiempo. Derramad ante El vuestros corazones, porque Dios es nuestro asilo. 10
Como un soplo son los hijos del vulgo 5
, una mentira los de abolengo 6
. Puestos en balanza suben, juntos pesan menos que un soplo. De nuevo se declara la total confianza en el que le otorga protección segura. Llevado de su experiencia al amparo de Dios, invita el poeta al
pueblo a mostrarse también confiado contra toda adversidad. Parece que aquí el salmista habla al pueblo, reunido en asamblea, para que exprese sus sentimientos de gratitud al Señor en una generosa efusión de sus
corazones, pues siempre encontrarán defensa y
asilo en la mano poderosa de Yahvé (V.9).
Nadie puede competir en poder con Yahvé: tanto los de la clase baja como los de la clase alta de la sociedad son
como un soplo, y,
puestos en una balanza, no pueden contrapesar con sus promesas y mentiras, sino que suben y desaparecen como
un soplo (v.10) por no tener fuerza y sustancia que les dé lastre frente a Dios. Sus asechanzas, pues, y sus cavilaciones no deben amedrentar
al que confía en Dios.
No se debe confiar en las riquezas, sino sólo en. Dios (11-13)
11
No confiéis en la violencia, ni en la rapiña os gloriéis. Si abundan las riquezas, no apeguéis vuestro corazón. 12
Una vez habló Dios, y estas dos cosas le oí: que sólo en Dios está el poder. 13
Y en ti, Señor, está la piedad, pues das a cada uno segun sus obras. Los fuertes procuran aumentar sus riquezas recurriendo a la
violencia y a la opresión del débil. La opulencia conseguida con injusticias es inconsistente, ya que no tiene la bendición divina, y, por tanto, está expuesta a las mayores decepciones
El corazón del ser humano debe estar por encima de todas las riquezas, ya que encuentra su único centro en Dios.. Sólo El puede aquietar sus profundas ansias espirituales. El salmista ha oído la voz de Dios en la conciencia, que le dice que el
poder proviene únicamente del Omnipotente, quien, por otra parte, retribuye a cada uno
según sus obras (v.13).
El camino de la rectitud es el único que lleva a la felicidad, pues el ser humano virtuoso camina bajo la
protección y bendición de Dios7.
1 Cf. 2 Sarn 15:1s. 2 Cf.
Sal_37:3-5-7;
Sal_31:24;
Sal_34:10;
Sal_49:5;
Sal_73:17. 3 En griego, el nombre de
Yedutún aparece bajo la forma de Iditún. Sobre su colección véase com. a
Sal_30:1, Según
1Cr_25:1-3, Idutún era uno de los levitas encargados del culto. La expresión Sobre
Yedutún parece tener el sentido de sobre el modo o aire de Idutún. 4 Cf.
Sal_12:3;
Sal_28:4;
Sal_55:22. 5 Lit. los hijos de Adán. 6 Lit. los hijos de varón. Sobre el sentido clase baja y clase alta véase com. a 49:3. 7 San Pablo, en
Rom_2:6s, desarrolla el pensamiento del v.1ab.