Deuteronomio  9 Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 2009) | 29 versitos |
1 Escucha, Israel. Hoy vas a pasar ya el Jordán para ir a desalojar a naciones más grandes y fuertes que tú, ciudades enormes, con murallas que llegan hasta el cielo.
2 Son gente corpulenta y de elevada estatura, hijos de Anac, a quienes tú conoces y de quienes has oído decir: «¿Quién puede hacer frente a los hijos de Anac?»
3 Pero has de saber hoy que Yahvé tu Dios va a pasar delante de ti como un fuego devorador: él los destruirá y te los someterá, para que tú los desalojes y los destruyas rápidamente, como te ha prometido Yahvé.
4 Cuando Yahvé tu Dios los vaya expulsando a tu paso, no digas para tus adentros: «Por mis méritos me ha hecho Yahvé entrar en posesión de esta tierra», siendo así que sólo por la perversidad de estas naciones las desaloja Yahvé a tu paso.
5 No pienses que llegarás a tomar posesión de su tierra por propios méritos ni por la rectitud de tu corazón. Si Yahvé tu Dios las desaloja a tu paso es sólo por la perversidad de dichas naciones; y también por cumplir la palabra que juró a tus padres, Abrahán, Isaac y Jacob.
6 Has de saber, pues, que no es por tu justicia por lo que Yahvé tu Dios te da en posesión esa tierra buena, ya que eres un pueblo de dura cerviz.
7 Acuérdate, no olvides de que irritaste a Yahvé tu Dios en el desierto. Desde el día en que saliste del país de Egipto hasta vuestra llegada a este lugar, no habéis dejado de rebelaros contra Yahvé.
8 También en el Horeb irritasteis a Yahvé, que montó en tal cólera contra vosotros como para destruiros.
9 Yo había subido al monte a recoger las tablas de piedra, las tablas de la alianza que Yahvé había concluido con vosotros. Allí permanecí durante cuarenta días y cuarenta noches: no probé alimento ni bebí agua.
10 Yahvé me dio las dos tablas de piedra, escritas por el dedo de Dios, en las que estaban todas las palabras que Yahvé os había transmitido en la montaña, de en medio del fuego, el día de la asamblea*.
11 Al cabo de cuarenta días y cuarenta noches, Yahvé me entregó las dos tablas de piedra, las tablas de la alianza,
12 al tiempo que me decía: «Avíate y baja de aquí a toda prisa, porque tu pueblo, el que tú sacaste de Egipto, se ha pervertido. Bien pronto se han apartado del camino que yo les había prescrito: se han fabricado un ídolo de fundición.»
13 Yahvé me dijo a continuación: «Me he dado cuenta que este pueblo es un pueblo de dura cerviz.
14 Déjame que los destruya y borre su nombre de debajo del cielo. De ti, en cambio, haré una nación más fuerte y numerosa que ésta.»
15 Yo me volví y bajé del monte (el monte ardía llameante), llevando las dos tablas de la alianza, una en cada mano.
16 Y pude comprobar que habíais pecado contra Yahvé vuestro Dios: os habíais fabricado un becerro de fundición. ¡Bien pronto os habíais apartado del camino que Yahvé os tenía prescrito!
17 Tomé entonces las dos tablas, las arrojé con mis manos y las hice pedazos en vuestra presencia.
18 Luego me postré ante Yahvé, como la otra vez, cuarenta días y cuarenta noches: no probé alimento ni bebí agua, por el pecado que habíais cometido, haciendo lo que Yahvé considera reprobable, hasta el punto de irritarle.
19 Lo hice porque tenía mucho miedo de la ira y del furor que irritaban a Yahvé contra vosotros, hasta el punto de que quería destruiros. Y una vez más me escuchó Yahvé.
20 También contra Aarón estaba Yahvé violentamente irritado, pues quería destruirle. Y también entonces intercedí en favor de Aarón.
21 Después tomé el objeto de vuestro pecado, el becerro que os habíais hecho, y lo arrojé al fuego; lo hice pedazos y lo trituré hasta dejarlo reducido a polvo. A continuación tiré el polvo al torrente que baja de la montaña.
22 También irritasteis a Yahvé en Taberá, y en Masá, y en Quibrot Hatavá.
23 Y cuando Yahvé os hizo salir de Cades Barnea diciendo que subierais a tomar posesión de la tierra que él os había dado, os rebelasteis contra la orden de Yahvé vuestro Dios; no creísteis en él ni escuchasteis su voz.
24 Habéis sido rebeldes a Yahvé vuestro Dios desde el día en que os conocí*.
25 Entonces me postré ante Yahvé y estuve así esos cuarenta días y cuarenta noches, porque Yahvé había hablado de destruiros.
26 Supliqué a Yahvé, diciéndole: «Señor Yahvé, no destruyas a tu pueblo y a tu heredad, que tú rescataste con tu grandeza y que sacaste de Egipto con mano fuerte.
27 Acuérdate de tus siervos Abrahán, Isaac y Jacob, y no tomes en cuenta la indocilidad de este pueblo, ni su maldad ni su pecado,
28 para que no se diga en el país de donde nos sacaste: ‘Como Yahvé no ha podido hacerlos entrar en la tierra que les había prometido, y por el odio que les tiene, los ha sacado para hacerlos morir en el desierto.’
29 Pero ellos son tu pueblo y tu heredad, los que tú sacaste con tu gran fuerza y tu tenso brazo.»

Patrocinio

 
 

Introducción a Deuteronomio 

No hay comentario

Fuente: Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)

Patrocinio

Notas

Deuteronomio  9,1
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_4:38+

[2] Deu_1:28+; Núm_13:33


Deuteronomio  9,3
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jos_3:3-4; Jos_6:8

[2] Deu_7:22+

Deuteronomio  9,4
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_8:17+; Job_7:2

[2] Deu_18:12

Deuteronomio  9,6
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_8:17+; Efe_2:7-9; Tit_3:5

Deuteronomio  9,7
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] |Éxo 32

NOTAS

9:7 Comienza aquí un nuevo conjunto que llega hasta Deu_10:11. Moisés recuerda, en primera persona, la historia del becerro de oro, las tablas de la Alianza rotas y hechas de nuevo y su intercesión. El género literario de esta sección recuerda el de los caps. 1-3. El relato es paralelo al de Ex 32, con algunas diferencias. No está hecho de una tirada, sino que se halla sobrecargado de una serie de adiciones, así Deu_9:20, Deu_9:22; Deu_10:6-8; las repeticiones son en él frecuentes.

Deuteronomio  9,10
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_5:2-22

NOTAS

9:10 Varias veces en el Dt la palabra qahal designa la asamblea religiosa del pueblo de Dios, especialmente el día de la promulgación de la Ley, Deu_18:16; ver Deu_4:10; Deu_23:2-9 [Deu_23:1-8]. Concepto que irá precisándose, 2Cr_31:18+, y que desembocará en la «iglesia» del NT, Mat_16:18+; Hch_7:38.

Deuteronomio  9,13
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_9:6; Deu_31:27; Éxo_32:9+; 2Re_17:14; Jer_7:26; Jer_17:23; Jer_19:15; Bar_2:30

Deuteronomio  9,18
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Heb_12:21

Deuteronomio  9,20
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Éxo_32:20

Deuteronomio  9,22
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Núm_11:1-3; Éxo_17:1-7; Núm_20:1-13; Núm_11:4-34; Núm_13:25; Núm_14:38; Deu_1:25-40

Deuteronomio  9,24
NOTAS

9:24 «os conocí» hebr.; «os conoció» griego, sam.

Deuteronomio  9,25
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] |Éxo_32:11-14+