Mateo 28 Biblia Peshitta en Español (Holman Bible Publishers, 2015) | 20 versitos |
1 Al amanecer del primer día de la semana, después de la tarde del día de reposo, fueron Mariam de Magdala y la otra Mariam a ver la tumba,
2 y he aquí que se produjo un gran temblor, porque un ángel de Yahweh había descendido del Cielo y al llegar rodó la piedra de la entrada y se sentó sobre ella.
3 Su apariencia era como la de un relámpago, y su vestidura blanca como la nieve.
4 Entonces los que estaban vigilando temblaron de miedo por causa de él, y estaban como muertos.
5 Y habló el ángel, y dijo a las mujeres: No tengan temor, porque yo sé que buscan a Jesús, el que fue crucificado.
6 Él no está aquí, porque ha resucitado tal como dijo. Vengan, vean el lugar donde fue colocado nuestro Señor,
7 y vayan rápido a decir a sus discípulos que Él ha resucitado de entre los muertos. He aquí, Él irá delante de ustedes a Galilea; allí lo verán. Miren que se los he dicho.
8 Ellas se marcharon de la tumba a toda prisa, con temor y gran gozo, y fueron corriendo a comunicárselo a sus discípulos.
9 Y he aquí que Jesús les salió al encuentro, y les dijo: La paz sea a ustedes. Entonces ellas se le acercaron, se abrazaron de sus pies y lo adoraron.
10 Entonces Jesús les dijo: No tengan temor, sino vayan a avisar a mis hermanos que se dirijan a Galilea. Allá me verán.
11 Y cuando ellas se marcharon, algunos de los guardias llegaron a la ciudad para informar a los principales sacerdotes de todas las cosas que sucedieron.
12 Se reunieron con los ancianos, y después de consultar entre ellos, sobornaron con una gran cantidad de dinero a los guardias,
13 diciéndoles: Digan que sus discípulos vinieron y lo hurtaron por la noche mientras ustedes dormían.
14 Y si el gobernador se entera de esto, nosotros lo persuadiremos y no les causaremos problemas.
15 Y recibiendo ellos el dinero, hicieron tal y como se les había instruido. Y este dicho se ha divulgado entre los judíos hasta hoy.
16 Entonces los once discípulos fueron a Galilea, al monte que Jesús les había señalado para reunirse.
17 Y al verlo, lo adoraron, pero algunos de ellos dudaban.
18 Acercándoseles Jesús, habló con ellos, y les dijo: Toda autoridad me ha sido dada sobre los cielos y sobre la tierra. Y tal como mi Padre me ha enviado, también yo los envío a ustedes.
19 Por tanto, vayan y hagan discípulos en todas las naciones, y bautícenlos en el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,
20 y enséñenles que guarden todo lo que les he ordenado. He aquí, yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.


Patrocinio

 
 

Introducción a Mateo

Fuente: