Levítico 5, 15-19

«Si alguien comete una prevaricación pecando por inadvertencia tomando algo de los derechos sagrados de Yahvé, ofrecerá a Yahvé su sacrificio de reparación, un carnero del rebaño, sin defecto, valorado en siclos de plata, en siclos del Santuario, como sacrificio de reparación. Resarcirá lo que defraudó de los derechos sagrados, y añadirá un quinto más, y se lo entregará al sacerdote. El sacerdote hará por él la expiación con el carnero del sacrificio de reparación; y se le perdonará.
«Si alguien peca, sin darse cuenta, haciendo algo prohibido por los mandamientos de Yahvé, se hace culpable y cargará con su pecado. Llevará al sacerdote, como sacrificio de reparación, un carnero del rebaño, sin defecto, según valoración; y el sacerdote hará expiación por él a causa de la falta que cometió sin darse cuenta, y se le perdonará. Es un sacrificio de reparación, pues era realmente culpable ante Yahvé.»
Ver contexto