Isaías 17, 13-14

(Masas que retumban, como retumbo de crecida retumban*). Pero él las increpa, y de lejos huyen, y son perseguidas como el tamo de los montes por el viento, y como torbellino por el huracán. A la hora del atardecer se presenta el miedo, antes de la mañana ya no existen. Ésa sea la parte de nuestros despojadores, la suerte de nuestros saqueadores.
Ver contexto