Jeremías  20, 10

Escuchaba las calumnias de la turba: «¡Terror por doquier*!, ¡denunciadle!, ¡denunciémosle!» Todos con quienes me saludaba estaban acechando un traspiés mío: «¡A ver si se distrae y lo sometemos, y podremos vengarnos de él!»
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