Juan  1, 14-18

Y la Palabra se hizo carne* y puso su Morada entre nosotros*; y hemos contemplado su gloria*, gloria que recibe del Padre como Unigénito, lleno de gracia y de verdad*. Juan daba testimonio de él, proclamando: «Éste era del que yo dije: El que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí, porque existía antes que yo.» De su plenitud hemos recibido todos gracia por gracia*. Porque la Ley fue dada por medio de Moisés; la gracia y la verdad nos han llegado por Jesucristo. A Dios nadie le ha visto jamás: lo ha contado el Hijo Unigénito*, que está en el seno del Padre.
Ver contexto