Santiago 5, 7-11

Hermanos, tened, pues, paciencia hasta la Venida del Señor. Fijaos en el labrador, que espera con paciencia que la tierra dé su precioso fruto, hasta recibir las lluvias* tempranas y tardías. Tened también vosotros paciencia y fortaleced vuestro ánimo, porque la Venida del Señor está cerca*. Hermanos, no os quejéis unos de otros, para no ser juzgados. Tened presente que el Juez está ya a las puertas. Hermanos, tomad como modelo de sufrimiento y de paciencia a los profetas, que hablaron en nombre del Señor. Ya sabéis que solemos proclamar felices a los que sufrieron con paciencia. Habéis oído hablar de la paciencia de Job, y ya sabéis el final que el Señor le dio; porque el Señor es compasivo y misericordioso.
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