Ezequiel  36, 5-13

por tanto, esto dice el Señor: Juro que en el fuego de mi celo hablo contra el resto de las naciones que se han apoderado de mi tierra con regocijo de corazón y mala entraña, despoblándola y saqueándola. Por eso profetiza a la tierra de Israel diciendo a los montes y a los cerros, a los cauces de los ríos y a los valles:
Esto dice el Señor: Yo hablo con celo y con cólera, porque han cargado con el oprobio de las naciones; por eso, así dice el Señor: Juro con la mano en alto que los pueblos que los rodean cargarán con sus propios ultrajes. Y ustedes, montes de Israel, echarán ramas y darán fruto para mi pueblo, Israel, que está para llegar. Porque yo voy hacia ustedes, me vuelvo hacia ustedes: serán cultivados y sembrados. Multiplicaré la población de toda la casa de Israel; serán repobladas las ciudades y las ruinas serán reconstruidas. Multiplicaré su población y su ganado serán muchos y fecundos y haré que los habiten como antiguamente y les concederé más bienes que al principio, y sabrán que yo soy el Señor. Haré que los transite la gente de mi pueblo, Israel; tomarán posesión de ustedes y serán su herencia y no volverán a quedarse sin hijos. Esto dice el Señor: Porque te dicen: Eres devoradora de hombres, has dejado a tu nación sin hijos;
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