Jeremías 31, 20
“
¡Si es mi hijo querido Efraín,
mi niño, mi encanto!
Cada vez que lo reprendo
me acuerdo de él,
se me conmueven las entrañas
y cedo a la compasión
– oráculo del Señor– . ”
mi niño, mi encanto!
Cada vez que lo reprendo
me acuerdo de él,
se me conmueven las entrañas
y cedo a la compasión
– oráculo del Señor– . ”