Salmos 23, 1-6

salmo 23 (22) °

El pastor-anfitrión

(1) salmo de David. El Señor es mi pastor, nada me falta: (2) en verdes praderas me hace recostar; | me conduce hacia fuentes tranquilas (3) y repara mis fuerzas; | me guía por el sendero justo, | por el honor de su nombre. (4) Aunque camine por cañadas oscuras, | nada temo, porque tú vas conmigo: | tu vara y tu cayado me sosiegan. (5) Preparas una mesa ante mí, | enfrente de mis enemigos; | me unges la cabeza con perfume, | y mi copa rebosa. (6) Tu bondad y tu misericordia me acompañan | todos los días de mi vida, | y habitaré en la casa del Señor | por años sin término.
Ver contexto