I Samuel 30, 7-8

y dijo al sacerdote Abiatar, hijo de Ajimélec: "Por favor, preséntame el efod". Abiatar presentó el efod a David, y David interrogó al Señor, en estos términos: "¿Debo perseguir a esa banda? ¿La alcanzaré?". El Señor le respondió: "Persíguela. Seguro que la alcanzarás y librarás a los cautivos".
Ver contexto