II Samuel  7, 14-16

Yo le seré a él padre y él me será a mí hijo. Si obrare el mal, yo le castigaré con varas de hombres y con azotes de hijos de hombres;" pero no apartaré de él mi misericordia, como la aparté de Saúl, arrojándole de delante de ti. Permanente será tu casa para siempre ante mi rostro, y tu trono estable por la eternidad.”
Ver contexto