Mateo 23, 6-8

gustan de los primeros asientos en los banquetes, y de las primeras sillas en las sinagogas, y de los saludos en las plazas, y de ser llamados por los hombres “rabí.” Pero vosotros no os hagáis llamar “rabí,” porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.
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