Nehemías 12, 39-47

y luego por la puerta de Efraím la puerta del Pescado, la torre de Jananael y la torre de Mea, hasta la puerta de las Ovejas, haciendo estación a la puerta de la Custodia. Pararon ambos coros en la casa de Dios, y yo con la mitad de los magistrados, y los sacerdotes Eliacim, Maasías, Minyamim, Mica, Elyoenai, Zacarías y Ananías, con trompetas;" y Maasías, Semeyas, Eleazar, Usí, Joyanán, Malquías, Elam y Ezer. Los cantores cantaban alto, dirigidos por Jisrajías. Sacrificáronse aquel día muchas víctimas y se hicieron grandes regocijos, porque había dado Dios al pueblo un gran motivo de alegría. Regocijáronse también las mujeres y los muchachos, oyéndose de lejos el alborozo de Jerusalén. Por entonces fueron puestos comisarios de las cámaras de las despensas, de las ofrendas, de las primicias y de los diezmos, para recibir de los campos y de las ciudades las porciones legales para los sacerdotes y levitas; porque estaba muy gozoso Judá de que los sacerdotes y los levitas estuvieran en sus puestos," observando cuanto concierne al servicio de Dios y a las purificaciones, y de que los cantores y porteros cumpliesen sus funciones según la ordenación de David y de Salomón, su hijo;" pues, desde el tiempo de David y de Asaf, ya de antiguo había jefes de cantores y se cantaban cantos de alabanza y de acción de gracias en honor de Dios. Todo Israel, en los días de Zorobabel y en los días de Nehemías, daba las porciones de los cantores y de los porteros, cada cosa en su día. Dábanse a los levitas las cosas sagradas, y los levitas daban a los hijos de Aarón la parte de las cosas consagradas.
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