Rut 1, 16-17

No obstante, rut le contestó: ¡Lejos esté de mí que me aparte de tu lado y te abandone! Porque adondequiera que tú vayas yo iré, y donde tú mores yo moraré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios. Donde tú mueras, también moriré yo y seré sepultada. ¡Así me haga Dios y aún me añada! Solamente la muerte podrá separarnos.
Ver contexto