Santiago 5 Biblia Hispanoamericana de la Nueva Evangelización (Sociedad Bíblica, 2015) | 20 versitos |
1

El peligro de la riqueza

Ustedes, los ricos, lloren y giman a la vista de las calamidades que se les van a echar encima. º
2 Su riqueza está podrida; sus vestidos están apolillados. º
3 Hasta su oro y su plata están siendo presa de la herrumbre, que testimoniará contra ustedes y devorará sus cuerpos como fuego. ¿Para qué amontonan riquezas ahora que el tiempo se acaba?
4 Miren, el salario defraudado * a los jornaleros que cosecharon los campos que les pertenecen a ustedes está clamando, y sus clamores han llegado a los oídos del Señor del universo º. º
5 Ustedes han vivido con lujo en la tierra, entregados al placer; con ello se han engordado para el día de la matanza º.
6 Han condenado y asesinado al inocente que ya no les opone resistencia.
7

Invitación a la paciencia

En cuanto a ustedes, hermanos, esperen con paciencia la venida gloriosa del Señor. Como espera el labrador el fruto precioso de la tierra, aguardando pacientemente que lleguen las [lluvias] de otoño y primavera º, º
8 así ustedes tengan paciencia y buen ánimo, porque está próxima la venida gloriosa del Señor. º
9 No se quejen, hermanos, unos de otros, para que no sean condenados; el juez ya está a las puertas. º
10 Como ejemplo de sufrimiento y de paciencia, tienen a los profetas, que hablaron en nombre del Señor. º
11 Consideramos dichosos a los que supieron mantenerse firmes. Más aún, ustedes tienen conocimiento de la firmeza de Job, y ya ven el feliz desenlace a que lo condujo el Señor; porque el Señor es compasivo y misericordioso. º
12 Pero, ante todo, hermanos, no juren ni por el cielo, ni por la tierra, ni con ningún otro juramento. Cuando digan “sí”, sea sí; y cuando digan “no”, sea no. De ese modo no incurrirán en condenación. º
13 ¿Sufre alguno de ustedes? Que ore. ¿Está gozoso? Que alabe al Señor. º
14 ¿Ha caído enfermo? Que mande llamar a los presbíteros de la Iglesia para que lo unjan con aceite en el nombre del Señor y hagan oración por él.
15 La oración hecha con fe sanará al enfermo; el Señor lo restablecerá y le serán perdonados los pecados que haya cometido.
16 Reconózcanse º, pues, mutuamente sus pecados y oren unos por otros. Así sanarán, ya que es muy poderosa la oración perseverante del justo. º
17 Ahí tienen a Elías, un ser humano como nosotros: oró fervientemente para que no lloviese, y durante tres años y seis meses º no cayó una gota de agua sobre la tierra.
18 Luego volvió a orar, y el cielo dio lluvia y la tierra produjo su fruto. º
19

Recomendación final

Hermanos míos, si uno de ustedes se aleja de la verdad y otro lo vuelve al buen camino,
20 sepan * que aquel que convierte de su extravío a un pecador, lo salvará * de la muerte y alcanzará el perdón º para un sinfín de pecados. º

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Introducción a Santiago

INTRODUCCIÓN


1. Características generales


Estamos ante un escrito del NT que ha llegado hasta nosotros bajo la denominación de carta, pero que en realidad parece más bien un sermón o una homilía de carácter moralizante. El breve saludo inicial (Stg 1:1) es ciertamente epistolar; sin embargo, el resto del escrito y sobre todo el final (Stg 5:19-20) no lo son en absoluto. El tono es constantemente oral. No es alguien que escribe, sino alguien que habla. Un escrito que pasó serias dificultades para entrar en la lista de libros sagrados; de hecho, sólo a partir de la segunda mitad del siglo IV todas las iglesias, tanto las de Oriente como las de Occidente, lo consideraron canónico de forma unánime. Incluso en los primeros tiempos de la Reforma volvió a ser objeto de ciertas reservas y recelos en algunos ambientes cristianos.


Desde el punto de vista literario, la llamada carta de Santiago (en adelante se utilizará preferentemente la abreviatura Stg) está redactada en un griego excelente, revela un buen conocimiento de la Biblia griega de los LXX (de la que toma todas las citas el AT) y utiliza el recurso de la “diatriba” propio de la filosofía popular helenística. Pero al mismo tiempo no se puede pasar por alto su constante inspiración en el AT, su inmersión en la cultura semita, tal como se refleja tanto en el estilo como en el vocabulario, y su parentesco con las tradiciones sapienciales veterotestamentarias y con el libro deuterocanónico del Eclesiástico.


Si se presta atención en el contenido, sorprende que el autor sólo dos veces, y como de pasada, menciona a Jesucristo (Stg 1:1; Stg 2:1). Ninguna referencia a su vida, muerte y resurrección; y cuando se trata de ofrecer modelos de paciencia en el sufrimiento, cita a Job y a los profetas, pero no a Jesucristo (Stg 5:10-11). En contrapartida, sin embargo, son numerosísimas y claras las resonancias y alusiones al mensaje de Jesús tal como lo transmiten los evangelios sinópticos, especialmente el sermón del monte en Mateo. Se han contabilizado hasta veintidós coincidencias entre Stg y el mencionado pasaje del primer evangelio (ver, a modo de ejemplo, Stg 1:2-4 y Mat 5:11-12; Stg 1:5-6 y Mat 7:7-8; Stg 1:22-23 y Mat 5:17-19; Mat 7:24-26; Stg 2:5-6; Stg 5:1-3 y Mat 6:19-20; Stg 2:12-13 y Mat 5:7; ver también Stg 3:1-12 y Mat 12:36-37).


Otro dato a tener en cuenta sería la velada polémica antipaulina presente, según bastantes autores, en determinados pasajes de Stg. En realidad es posible que algunas iglesias de implantación paulina hubieran malinterpretado la enseñanza de Pablo sobre la relación fe-obras en el proceso de salvación del creyente y hubieran roto unilateralmente todo contacto incluso con los aspectos válidos del judaísmo. El autor de Stg parece salir al paso de estas posturas radicales tratando de conservar una serie de valores cristianos heredados del judaísmo que, a su parecer, estaban siendo peligrosamente amenazados.


2. Marco histórico


Lo dicho en el apartado anterior explica la dificultad de precisar tanto los destinatarios como el autor y la fecha de composición de este escrito del NT. Los destinatarios podrían ser comunidades básicamente judeocristianas, pero con miembros procedentes también del paganismo y establecidas probablemente en ciudades helenísticas; comunidades en las que puede estar siendo mal interpretada la enseñanza paulina y que necesitan reafirmar y vivir la fe en Jesucristo en un ambiente social, cultural y religioso claramente adverso.


Más complicada es la cuestión del autor, relacionada evidentemente con la fecha de composición. El encabezamiento atribuye la carta-exhortación a Santiago, servidor de Dios y de Jesucristo (Stg 1:1). Si la atribución ha de darse por buena, ¿a qué Santiago se refiere? Sin duda que no a Santiago, el hijo de Zebedeo, martirizado el año 44 d. C. por Herodes Agripa I (ver Hch 12:2); probablemente tampoco a Santiago, el hijo de Alfeo (ver Mat 10:3; Hch 1:13). Podría ser Santiago, el hermano del Señor (Mar 6:3; Mar 15:40; Gál 1:19) que es presentado como autoridad importante de la iglesia de Jerusalén (Hch 12:17; Hch 15:13; Hch 21:18; Gál 2:9; Gál 2:12; 1Co 15:17). Esta última opinión ha sido y sigue siendo sostenida por muchos autores, alguno de los cuales sugiere que Santiago habría “utilizado a un helenista de su entorno” para redactar la carta. Si este Santiago, responsable de la iglesia de Jerusalén, fue martirizado el año 62 d. C., según el testimonio del historiador Flavio Jesefo, la carta sería naturalmente anterior a esta fecha.


Pero no está descartado que el escrito sea de época posterior, en torno tal vez al año 80 d. C. En tal caso el autor, un cristiano de origen judío con honda implantación helenística, habría utilizado el nombre de Santiago para dar autoridad y notoriedad a su escrito.


3. Contenido


Stg no es un tratado de índole doctrinal. Es un escrito pastoral de carácter práctico, una cálida exhortación a vivir positivamente “en cristiano”, a manifestar la fe del corazón mediante la rectitud en la conducta. Para conseguir su objetivo, el autor combina hábilmente motivos y temas judíos y cristianos en un encomiable esfuerzo ecuménico: la fe monoteísta (Stg 1:18; Stg 2:19), el valor de las buenas acciones (Stg 2:14-26), el dominio de la lengua (Stg 1:19; Stg 1:26; Stg 3:2-12), el peligro de los bienes materiales (Stg 1:9-11; Stg 5:1-6), el compromiso a favor de los débiles (Stg 2:1-9), la búsqueda de la sabiduría (Stg 1:5; Stg 3:13-17), la justicia en las relaciones laborales (Stg 5:1-6), la esperanza en la venida gloriosa del Señor (Stg 5:7-8), el poder de la oración (Stg 5:13-18), el reconocimiento de los propios pecados (Stg 4:8-10; Stg 5:16), la preocupación por los hermanos (Stg 1:27; Stg 5:20), etc.


A la vista de todos estos temas, no cabe duda de que la dimensión social de la fe en Jesucristo es un valor de primera magnitud para el autor de Stg. La dimensión social y también la coherencia entre la vida y el culto. Si el cristiano tiene que transformar al mundo, sólo podrá hacerlo desde una fe auténtica y comprometida.


4. Estructura


— Saludo (Stg 1:1)


I. — UNA FE AUTÉNTICA Y COHERENTE (Stg 1:2Stg 2:26)


II. — CUESTIONES CONCRETAS DE VIDA CRISTIANA (Stg 3:1Stg 4:10)


III. — JUICIO Y SALVACIÓN (Stg 4:11Stg 5:18)


Fuente:

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Notas

Santiago 5,1Isa 5:8-10; Jer 5:26-30; Amó 8:4-8; Luc 6:24.


Santiago 5,2Sal 21:9; Mat 6:19-20.
Santiago 5,4— el salario defraudado: Según variante de algunos mss., también podría traducirse: el salario retenido.

— del universo: Esta expresión traduce el vocablo sabaoth, apelativo que el AT da con frecuencia a Dios y del que se desconoce cuál pueda ser su significado exacto. Una traducción bastante común ha sido la de Dios de los ejércitos, en la que el término ejércitos se referiría a “los ejércitos de los cielos”, es decir, al conjunto de los astros.
Santiago 5,4Gén 4:10; Sal 18:6; Lev 19:13; Deu 24:14-15; Mal 3:5.
Santiago 5,5— para el día de la matanza: Según esta traducción es clara la alusión al día del juicio (ver Isa 34:6; Jer 12:3; Jer 25:34; Eze 21:10). Pero es posible también traducir: en el día de la matanza, con lo que se aludiría más bien a las grandes violencias e injusticias de que ya en esta vida han sido víctimas los inocentes y desvalidos por parte de los poderosos.
Santiago 5,7Deu 11:14; Jer 5:24; Joe 2:23.
Santiago 5,7— que lleguen las [lluvias] de otoño y primavera: Lit. que llegue lo temprano y lo tardío. Lo más probable es que se trate de la lluvia, y así lo especifican bastantes mss. Según otros mss., sin embargo, se trataría del fruto temprano y tardío.
Santiago 5,8Mat 24:3; Mat 24:37; Rom 13:11-12; Flp 3:20; Flp 4:5; 1Ts 2:19; 1Ts 4:15; 1Ts 5:23; 2Ts 2:1; Heb 10:25; 1Pe 4:7.
Santiago 5,9Mat 24:33.
Santiago 5,10Mat 5:12; Mat 23:29-31; 1Ts 2:15; Heb 11:32-38.
Santiago 5,11Dan 12:12; Job 1:20-22; Job 2:10; Job 42:10-17; Éxo 34:6; Sal 86:15; Sal 103:8; Sal 111:4; Sal 145:8.
Santiago 5,12Mat 5:34-37; (ver Sir 23:9-11).
Santiago 5,131Co 14:15; Efe 5:19-20; Col 3:16-17; 1Ts 5:17.
Santiago 5,16Esd 9:5-15; Dan 9:4-20; Bar 1:14-21; Bar 2:1-20; Mat 3:6; Hch 19:18.
Santiago 5,16— reconózcanse: O bien: confiésense.
Santiago 5,17— tres años y seis meses: Este período de tiempo no está constatado en el AT, que habla más bien de dos años (1Re 17:1; 1Re 18:1); se trata, sin duda, de una tradición judía que ha sido también recogida en Luc 4:25. En cuanto al personaje mismo de Elías, era muy popular entre los judíos (Mal 4:5; Sir 48:1-11) y siguió siéndolo entre los cristianos de la Iglesia primitiva (Mat 11:14; Mat 16:14; Mat 17:2; Mat 17:10-12; Mar 9:11-13; Luc 1:17; Luc 9:30; Jua 1:21).
Santiago 5,181Re 18:42-45; (ver Gén 18:22-32; Éxo 32:11-14; Éxo 32:30-32; Jer 14:11; Jer 18:20; Amó 7:2; Amó 7:5).
Santiago 5,201Ti 4:16; 1Pe 4:8; 1Jn 5:16; (ver Eze 3:20-21; Pro 10:12).
Santiago 5,20— sepan: Según variante avalada por algunos de los más antiguos y mejores mss., también podría traducirse: sepa que.

— lo salvará: El texto griego no deja suficientemente claro quién es el destinatario de la salvación; podría ser también el que colabora a la conversión del pecador, y en ese caso la traducción sería: se salvará a sí mismo de la muerte.

— alcanzará el perdón para: Lit. cubrirá un.